El ser humano está lleno de actos involuntarios que nos acompañan durante toda nuestra vida; tales como el estornudo, pestañar o simplemente bostezar.
En el acto del bostezo no es raro ver a las personas taparse la boca luego de hacerlo y esto es entendido como método para esconder los dientes, disipación de gérmenes o simplemente para guardar las buenas costumbres.
Sin embargo, los orígenes de esta costumbre nos indican lo menos pensado por parte de quienes estamos acostumbrados a taparnos la boca al bostezar.
Todo parece indicar que esta tradición empieza en la edad media en donde todos sentían un horror desmesurado por Satanás; es así que las personas se tapaban la boca para evitar que este entrara en su cuerpo y terminara por poseerlos.
0 comentarios:
Publicar un comentario